De acuerdo con la norma ISO 16000-1, una auditoría de calidad del aire interior debe incluir los siguientes componentes:
- Identificación de los objetivos de la auditoría: Se deben identificar los objetivos de la auditoría, como la evaluación de la calidad del aire interior, la identificación de fuentes de contaminación y la evaluación de la eficacia de las medidas de control.
- Selección de los parámetros de medición: Se deben seleccionar los parámetros de medición adecuados para evaluar la calidad del aire interior, como la concentración de dióxido de carbono, la temperatura, la humedad relativa, la concentración de partículas y la concentración de compuestos orgánicos volátiles.
- Muestreo y análisis de las muestras: Se deben tomar muestras de aire en diferentes áreas del edificio y analizarlas para determinar la concentración de los parámetros seleccionados.
- Evaluación de los resultados: Se deben evaluar los resultados de las mediciones y compararlos con los valores de referencia de las normas ISO, OSHA, ASHRAE, EPA, entre otras.
- Identificación de las fuentes de contaminación: Se deben identificar las fuentes de contaminación y evaluar su impacto en la calidad del aire interior.
- Evaluación de las medidas de control: Se deben evaluar las medidas de control existentes y determinar su eficacia para reducir la concentración de contaminantes en el aire interior.
- Elaboración de un informe de auditoría: Se debe elaborar un informe de auditoría que incluya los resultados de las mediciones, las recomendaciones para mejorar la calidad del aire interior y las medidas de control, y un plan de seguimiento para evaluar la eficacia de las recomendaciones.
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